Un par...
Un par de tetas, no me hace ser mujer,
Ni te dirá que luchas he batallado...
Mucho menos, te dirá de qué manera puedo amar...
Somos esclavas de un mundo superficial, donde tenerlas te hace notar. te hace SER, y puedes pertenecer al estereotipo equívoco de la sociedad.
Nadie, pero nadie, tiene el derecho de discriminar a quienes luchamos, por sobrevivir de enfermedades tan crueles como el cáncer, nadie, pero nadie, puede matarnos, mirarnos con ojos de muerte, acariciar nuestras manos con lastima... Nadie, pero nadie, tiene derecho hacernos sentir muertas, cuando estamos ahora viviendo, aferradas a un último suspiro, a un chispa de vida... Que nadie, pero nadie, nos trate con palabras de aliento sin sentirlas... Somos vida, damos vida, peleamos contra la muerte, precisamente, porqué la vida aún nos da vida... Hay un día para nacer, otro para morir y lo que hay en el medio, es el sentido y el valor que le damos a ese intervalo de tiempo.
Por eso, decir un te quiero, un te amo a tiempo, hace la diferencia entre morir en silencio o morir sintiendo.
(Dedicado a todas aquellas mujeres, que no nos damos aún por vencidas, miramos a los ojos a la muerte y le mostramos de que manera amamos la vida).
Beatriz Fonnegra.
Ni te dirá que luchas he batallado...
Mucho menos, te dirá de qué manera puedo amar...
Somos esclavas de un mundo superficial, donde tenerlas te hace notar. te hace SER, y puedes pertenecer al estereotipo equívoco de la sociedad.
Nadie, pero nadie, tiene el derecho de discriminar a quienes luchamos, por sobrevivir de enfermedades tan crueles como el cáncer, nadie, pero nadie, puede matarnos, mirarnos con ojos de muerte, acariciar nuestras manos con lastima... Nadie, pero nadie, tiene derecho hacernos sentir muertas, cuando estamos ahora viviendo, aferradas a un último suspiro, a un chispa de vida... Que nadie, pero nadie, nos trate con palabras de aliento sin sentirlas... Somos vida, damos vida, peleamos contra la muerte, precisamente, porqué la vida aún nos da vida... Hay un día para nacer, otro para morir y lo que hay en el medio, es el sentido y el valor que le damos a ese intervalo de tiempo.
Por eso, decir un te quiero, un te amo a tiempo, hace la diferencia entre morir en silencio o morir sintiendo.
(Dedicado a todas aquellas mujeres, que no nos damos aún por vencidas, miramos a los ojos a la muerte y le mostramos de que manera amamos la vida).
Beatriz Fonnegra.
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