Háblame de amor, marinero
Háblame de amor, marinero,
faro de mis madrugadas serenas
háblame del sol que se esconde
entre sábanas de agua y fuego
a esa hora en que el cielo se quema.
Cuéntame cómo te besa el viento
y se baña tu rostro de espuma
mecido en un ir y venir de olas,
si vas de timonel de tu velero
navegando en noches sin luna.
Háblame de amor, marinero,
bésame como a ti te besa el viento
pero nunca me cuentes si tus besos
siempre al acecho como gaviota en vuelo,
hicieron nido alguna vez en otras bocas.
María Elena Astorquiza V.
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